Divulgación científica en programas de televisión ¿una necesidad latente?

Escrito por Marcos Campos Nava y Agustín Alfredo Torres Rodríguez

El 25 de abril de 2017 será recordado (por algunos) porque el canal de televisión privada National Geographic (NatGeo) estrenó la serie de televisión “Genius”, basada en la vida y obra del científico Albert Einstein. Este lanzamiento fue posterior al de la colección de libros “Grandes Ideas de la Ciencia” que la misma empresa lanzó en 2016 en México, cuyo primer ejemplar trató también sobre la vida y obra de Einstein.

Estos dos acontecimientos nos llevaron  a suponer que tal vez existe un ambicioso proyecto de NatGeo por producir varias temporadas de “Genius”,  plasmando la vida y obra de algunos de los científicos más influyentes en la historia; una forma de difundir  ciencia  masivamente en un canal que si bien no es público ni goza de los ratings que otro tipo de canales pudieran tener, es accesible a muchas personas, a diferencia de hace décadas, cuando tener televisión por cable o vía satélite era un lujo que pocos tenían.

La primera temporada de “Genius” que consta de diez episodios, tuvo un buen balance entre el contenido científico y el drama sobre la vida del personaje (en un claro intento de hacerla atrayente a un público masivo), fue nominada a diez categorías en los premios Emmy 2017 (considerado el premio análogo a los Óscar en la industria televisiva). 

Motivados por lo anterior, nos detuvimos a reflexionar sobre el tema, surgiendo de manera natural algunas preguntas:

¿Actualmente las cadenas de televisión están interesadas en producir programas con contenido científico?

¿Qué características deberían tener las series de televisión que hacen divulgación científica?

¿La televisión sigue siendo el principal medio masivo de comunicación o se debería incursionar en las nuevas modalidades de presentación de contenidos como las plataformas online de paga?

¿Qué ha ocurrido con el interés de la población en programas con contenido científico, se ha mantenido, ha aumentado o ha disminuido?

Algunas de estas preguntas no son fáciles de contestar, sin embargo, la última pregunta que planteamos da pie a llevar a cabo un recuento de algunos de los programas de televisión, que en décadas recientes fueron un intento por hacer divulgación científica en México. 

Algunos programas de divulgación científica en TV

Para lectores muy jóvenes, el nombre que mencionaremos parecerá extraño, pero probablemente sus padres lo recuerden y tal vez coincidan con nosotros en que este programa fue uno de los primeros acercamientos que como niños tuvimos con tópicos científicos, nos referimos a “Odisea Burbujas”.

Este programa fue producido por la empresa mexicana Televisa, tuvo su primera emisión en 1979 por el canal dos de televisión abierta y su última emisión fue en 1984 (con un relanzamiento en 2003, que tuvo poco éxito). Siendo una serie con periodicidad semanal, cada episodio presentaba las aventuras de un científico llamado profesor Memelovsky y sus asistentes, un grupo de animales con apariencia humana, quienes vivían diversas aventuras en las que se presentaban personajes históricos de la ciencia y sus descubrimientos, pues el profesor tenía una máquina para viajar en el tiempo, además intentaba fomentar desde entonces conciencia ecológica entre los televidentes.

Uno de los asistentes del profesor, mimoso ratón, fue quien en algún capítulo interpretó una canción que llevó por título ¿Dónde están los asteroides? En la cual decía en forma melódica el orden de los planetas del sistema solar, (incluido Plutón), lo que sirvió para que más de un niño de la época los conociera.

Otra producción mexicana de la misma casa productora y que también abordada algunos contenidos científicos fue “Cantinflas Show”, la serie tuvo su primera emisión en 1972 y su última en 1982, empleando un formato de dibujos animados en episodios de cinco minutos de duración. Los anteriores casos son de los pocos ejemplos de producciones de divulgación científica hechos en México el siglo pasado.

En el presente siglo resulta difícil encontrar producciones mexicanas que tengan un tiempo de exhibición al aire y un número de temporadas equiparables con las antes mencionadas. Recientemente el canal once de televisión abierta lanzó en septiembre de 2015 la serie “Sofía Luna: Agente especial” que constó de una temporada de trece episodios, en la trama se pueden seguir las aventuras de Sofía Luna, estudiante de Física que termina volviéndose agente especial en la lucha contra el crimen y que hace uso de sus conocimientos científicos para ello.

En cuanto a producciones extranjeras transmitidas en México en el siglo pasado, podemos mencionar a la serie documental conocida como “The Ascent of Man” (El ascenso del hombre) producida por la cadena Corporación de Radiodifusión Británica (BBC, por las siglas en inglés -British Broadcasting Corporation), cuyo presentador fue el matemático británico Jacob Bronowski, que tuvo su primera emisión en 1973 y constó de trece episodios de aproximadamente una hora cada uno; fue transmitida en el canal once de televisión abierta en México, a finales de la década de los años setenta.

 Otra serie documental transmitida en México en el año de 1982 fue “Cosmos: A personal Voyage” (Cosmos un viaje personal), cuyo presentador fue el astrónomo norteamericano Carl Sagan. La serie fue producida por la cadena norteamericana KCET en el año de 1980, (no confundir con la continuación de la serie que NatGeo produjo en 2014). Cosmos fue sin duda un ejercicio de divulgación que probablemente marcó a generaciones de televidentes de la década de los años ochenta y que pudo ser la inspiración para que algunas personas se dedicaran profesionalmente a tópicos relacionados con la ciencia.

En la década de los años noventa del siglo pasado, un científico con una apariencia poco solemne comparado con Bronowski y Sagan, apareció en las pantallas de la televisión abierta en México, con cabello alborotado, bata de laboratorio verde y dos asistentes pocos convencionales (uno de ellos literalmente una rata de laboratorio), nos referimos a “Beakman’s  World” (El mundo de Beakman), que fue producida por el estudio de televisión CBS en Estados Unidos  y su primera emisión fue en 1992. En México se transmitió entre el año 1994 y 2002 por canales de televisión abierta de contenido cultural como el canal once, tuvo más de noventa episodios. Actualmente se sigue transmitiendo en televisión abierta, ya que la manera en que este excéntrico personaje realiza experimentos para explicar principios científicos, al parecer sigue gustando a las generaciones actuales, aunque se trata de la retransmisión de los episodios originales.

Programas en este siglo

En el presente siglo también ha habido algunos esfuerzos por tratar de difundir la ciencia a través de series de televisión, como es el caso de “Numb3rs”, programa de televisión con temática policiaca producido por CBS, que constó de seis temporadas, desde su primera emisión en 2005, hasta la última temporada en 2010.  Lo interesante de la serie es que, en su trama, el FBI recluta a un matemático para que les ayude a resolver casos difíciles.

Si bien “Numb3rs” logró difundir algunos tópicos de matemáticas usando como pretexto la solución de casos criminales y probablemente fue la inspiración de más de uno para querer dedicarse a las matemáticas. “The Big Bang Theory” ha hecho lo propio con la física, programa producido también por CBS, durante diez temporadas y aún en emisión, desde el año 2007, ha llegado a varias generaciones de adolescentes que por primera vez tuvieron un acercamiento a tópicos de ciencia, debido a las rutinas cómicas de los protagonistas. 

¿Qué tenemos en México ahora?

Reiterando que no ha sido un ejercicio exhaustivo de revisión, muchos programas seguramente quedaron en el olvido, y muchos otros más recientes tampoco fueron mencionados, basta con sintonizar hoy día NatGeo para encontrarse con programas como “La Ciencia de lo Absurdo” y “Juegos Mentales” o “Factor Ciencia” de canal once.

Pareciera ser que al menos en los canales de televisión abierta que no son de contenido cultural, cada vez existen menos opciones de series que traten de difundir la ciencia entre la población, lo anterior puede deberse a que en plataformas como YouTube, se encuentra disponible mucho del material que aquí reseñamos y tal vez los productores de televisión consideran que ya no es necesario tener más series con ese tipo de contenido.

Debido a que hay consenso de que es necesario que en México exista un mayor interés entre los jóvenes por estudiar profesiones relacionadas con contenidos científicos, es que consideramos que existe una necesidad latente por incrementar la producción de programas de televisión de divulgación científica hechos en México y no depender solamente de producciones de origen extranjero como actualmente ocurre.

El esfuerzo llevado a cabo por NatGeo con “Genius”, es un ejemplo que pudieran tomar cadenas de televisión abierta para volverse a interesar en producir series de televisión con contenido científico, adecuados a los intereses de las nuevas generaciones, teniendo en cuenta que siendo la televisión uno de los medios masivos de mayor difusión, pudiera tener un impacto favorable para coadyuvar a que cada vez más jóvenes se interesen en tópicos de la ciencia. 

Saber más:

La TV: una forma divertida de abrir puertas a la ciencia. Disponible en:

http://expansion.mx/entretenimiento/2014/02/19/la-tv-una-forma-divertida-de-abrir-puertas-a-la-ciencia-beakman

La divulgación de la ciencia en México desde los distintos campos de acción: Retos y Oportunidades. Disponible en:

 http://www.redpop.org/wp-content/uploads/2015/06/divulgacion_mexico_somedicyt.pdf

¿Divulgación o entretenimiento? Ciencia Recreativa en los espacios televisivos. Disponible en: http://roderic.uv.es/bitstream/handle/10550/46448/P%C3%A1ginas%20deeCREATIVIDAD_E_INNOVACI%C3%93N_GAL2_130315f.pdf?sequence=1 

Marcos Campos Nava es Profesor de Tiempo Completo en el Área Académica de Matemáticas y Física de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo. 

Agustín Alfredo Torres Rodríguez es estudiante del Doctorado de Ciencias de la Educación en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Profesor del Departamento de Ciencias Básicas, Tecnológico Nacional de México/Instituto Tecnológico de Atitalaquia. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.