**El pez que regresó de la extinción en el día de muertos

Escrito por Arely Ramírez-García y Omar Domínguez-Domínguez

El tradicional Día de Muertos en México es una celebración que simboliza el encuentro entre los vivos y las ánimas de los fallecidos, y en donde aquellos sentimientos de tristeza y nostalgia se convierten en alegría, gozo y fiesta, pues los difuntos regresan por unas horas al mundo de los vivos para reunirse y celebrar con su familia. Pero, ¿qué pasaría si no solo los humanos que se han ido regresaran en esta fecha, sino que también lo hicieran los animales que se han extinto en la naturaleza? Basados en esta tradición mexicana, se llevó a cabo el evento llamado «Skiffia por siempre» en Teuchitlán, Jalisco, México, en el cual se realizó una celebración por el regreso de un pez que se encontraba extinto en la naturaleza: Skiffia francesae.

El evento se realizó en dos momentos. El primero se llevó a cabo la mañana del 4 de noviembre en el Centro Interpretativo Guachimontones, con el objetivo de dar a conocer al público en general las distintas acciones que se realizan en torno a la conservación del río y de las especies nativas y endémicas del lugar, las cuales son desarrolladas por actores locales, principalmente de la iglesia, por los Guardianes del Río, por el gobierno local y por el Centro Interpretativo Guachimontones, así como por el grupo académico del Laboratorio de Biología Acuática de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH). Además, en el evento estuvieron presentes invitados especiales de distintas organizaciones internacionales como el zoológico de Chester de Inglaterra y la asociación Shoal.

El segundo momento de este gran evento se realizó el mismo 4 de noviembre por la noche, en el balneario El Rincón, en el que se desarrollaron actividades artísticas y culturales como la presentación de bailables regionales, danzas prehispánicas y una obra de teatro presentada por miembros del Laboratorio de Biología Acuática, donde contaron la historia de la desaparición de Skiffia francesae del río Teuchitlán. Durante el evento, los pequeños Guardianes del Río también participaron creando un acróstico sobre Skiffia y, al finalizar, para que la extinta Skiffia encontrara el camino de regreso a casa, mediante una representación del camino del Mictlán, se realizó la primera reintroducción formal de estos pececitos a la zona de manantiales del río Teuchitlán.

La especie Skiffia francesae, conocida como la Skiffia dorada, es un pez de la familia Goodeidae, nativo y endémico del río Teuchitlán. Desafortunadamente, se extinguió de su lugar de origen y, aunque las causas son desconocidas, se cree que fue por la contaminación del agua, la invasión de especies no nativas y las modificaciones del río hechas por los humanos, como el cambio de las riberas naturales por caminos lineales peatonales. Afortunadamente, se tenían organismos de esta especie en cautiverio, los cuales en 1999 fueron donados por acuaristas de Europa al Laboratorio de Biología Acuática. Después de 20 años mantenidos en acuarios, en 2019, y siguiendo los mismos protocolos que para la reintroducción de Zoogoneticus tequila, inició el proyecto para la reintroducción de S. francesae al río Teuchitlán (Saber Más, 56, 46-50).

La primera reintroducción de Skiffia a la zona de manantiales fue en abril de 2021 y se monitoreó por algunos meses, desafortunadamente ningún pez sobrevivió. En la segunda reintroducción, realizada en 2022, se colocaron en la parte alta del río 20 jaulas flotantes, llamadas mesocosmos, con el fin de determinar la supervivencia en las condiciones ambientales que presenta en la actualidad el río, además de entender si lograba convivir con una especie no nativa que se ha documentado que es invasora en el lugar llamada Pseudoxiphophorus bimaculatus. Antes de llevar las Skiffias de vuelta a casa, se realizó un proceso de desparasitación de mil quinientos peces (mitad hembras y mitad machos), tomados del jardín botánico de la Facultad de Biología de la UMSNH para no liberar peces con parásitos en el río Teuchitlán.

Estos fueron marcados con un polímero líquido llamado elastómero, el cual fue colocado en la parte dorsal de cada uno de los peces y que es visible con luz negra, como si se les colocara un tatuaje permanente y luminiscente. Los peces fueron distribuidos en distintos tratamientos en los 20 mesocosmos, algunos en combinación con la especie no nativa, siendo monitoreados durante tres meses. Los resultados mostraron que Skiffia era capaz de sobrevivir en las condiciones del agua que presenta el río Teuchitlán, de encontrar alimento y de tolerar la competencia con la especie no nativa, pero mostró altas tasas de mortalidad y daños externos en sus aletas. Aun así, algunos organismos de Skiffia lograron dejar descendencia, ya que al finalizar el experimento, se contabilizó un aproximado de 400 alevines nacidos en los mesocosmos. A partir de estos resultados se procedió a realizar la reintroducción en la zona de manantiales, precisamente en el día del evento de «Skiffia por siempre».

Se seleccionaron ochocientos peces del jardín botánico, mismos que se desparasitaron y marcaron previa a la reintroducción: cuatrocientos fueron marcados de color rosa (hembras) y 400 de color azul (machos). Estos fueron llevados a Teuchitlán en un viaje de cuatro horas y media de camino (346 km aproximadamente) en dos momentos. El primero consistió en transportar 400 peces (marcados con color rosa) una semana antes del evento para dejar que se aclimataran en los mesocosmos que ya estaban instalados. El segundo fue tomar a los organismos de las peceras del Laboratorio de Biología Acuática el mismo día de la reintroducción y transportarlos directamente a la zona de manantiales en el balneario El Rincón (marcados de color azul). El día del evento de «Skiffia por siempre» se reintrodujeron todos los peces (tanto los rosas como los azules) en la zona de manantiales, los que fueron monitoreados con equipo de snorkel a partir del día siguiente hasta una semana después. En este monitoreo, básicamente solo se lograron encontrar a los peces marcados de color rosa, mientras que los pocos organismos marcados de color azul que se encontraron, presentaban la aleta caudal rota, tal como los que se habían encontrado en la experimentación en mesocosmos.

Este es un primer acercamiento sobre la reintroducción de esta especie extinta en la naturaleza, por lo que seguiremos monitoreando a los organismos liberados, a la vez que se continuará con más liberaciones para aumentar su población y con ello que nuestra Skiffia regrese del mundo de la extinción a la naturaleza, no solo el Día de Muertos, sino por siempre.

Agradecemos la participación tan activa de los Guardianes del Río, un grupo de entusiastas niños y adultos que aman la conservación de la naturaleza.

 

**Este proyecto es desarrollado por investigadores y estudiantes de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, México. Las actividades de educación ambiental son desarrolladas por los Guardianes del Río Teuchitlán. Proyecto patrocinado por varias instituciones nacionales e internacionales: El zoológico de Chester (Inglaterra), The Mohammed Bin Zayed Species Conservation Found, el zoológico Haus desr Meeres - Aqua Terra, Poecilia Scandinavia, SHOAL, Re:wild, Poecilia Netherlands, The Missouri Aquarium Society, Deutsche Gesellschaft für Lebendgebärende Zahnkarpfen, British Livebearer Association, Goodeid Working Group, American Livebearers Association, Association Beauval Nature Pour la Conservation et la Recherche y Wilhelma, zoologisch botanischer Garten.

 

 

 Para Saber más:

 

Laboratorio de Biología Acuática. https://bioumich.wixsite.com/acuaticaumsnh/proyectos-de-conservacion

 

Goodeid Working Group. http://www.goodeidworkinggroup.com/home

 

Guardianes del río Teuchitlán. https://m.facebook.com/people/Guardianes-del-r%C3%ADo-Teuchitl%C3%A1n/100069923225348/

 

Arely Ramírez-García. Laboratorio de Biología Acuática, Facultad de Biología, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Morelia, Michoacán, México.

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Omar Domínguez-Domínguez. Laboratorio de Biología Acuática, Facultad de Biología, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Morelia, Michoacán, México.

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