A mí —y seguramente a la mayoría de ustedes— me enseñaron que hubo un período de la humanidad oscuro, terrorífico, sucio y lleno de mortandad e injusticias: la llamada Edad Media. De hecho, los mitos e infundios sobre esta época tienen una difusión casi universal; el cine, la literatura, la televisión y hasta los videojuegos han utilizado este periodo del desarrollo humano como ejemplo de todo lo malo.
Horacio Cano Camacho Dicen que la historia la escriben los vencedores, y el caso de la Edad Media es paradigmático. Para empezar, los habitantes de la Edad Media no sabían que vivían en la Edad Media, ni a nadie se le habría ocurrido construir una «iglesia gótica»: esos son términos creados a posteriori. Flavio Biondo (1392-1463), un historiador que escribió Historiarum ab inclinatione Romanorum imperii, dividió la historia en tres edades: Antigua, Media y Moderna. De forma un tanto artificial, Leonardo Bruni (1370-1444), otro historiador y humanista florentino, ya había planteado una distinción entre «antiguos» y «modernos», saltándose un periodo de casi mil años. En el Renacimiento existía una fuerte tendencia a rescatar la cultura clásica griega y romana, y se asumía que ese «renacer» se producía tras un periodo de oscuridad. Malinterpretando esa idea, se empezó a considerar que entre la Antigüedad y el Renacimiento había habido una época de sequía cultural. A partir de ahí, esa visión negativa se perpetuó, incluso inventando argumentos para sostenerla. Los pensadores del Renacimiento (siglos XV-XVI), como Petrarca, veían su tiempo como un renacer de la cultura clásica y consideraban que los siglos anteriores habían sido una etapa de decadencia, en comparación con la grandeza de la Antigüedad. Esta idea fue reforzada por los movimientos reformistas del siglo XVI, que veían el periodo anterior —dominado por la Iglesia católica— como un tiempo de oscuridad y corrupción. Desde el siglo XX, sin embargo, los historiadores han demostrado que la Edad Media fue un periodo complejo, diverso y creativo, no una simple etapa oscura. Pensemos, por ejemplo, en la construcción de las grandes catedrales —hoy llamadas góticas—, con todos sus aportes en ingeniería y arquitectura; en la fundación de las primeras universidades; o en la invención de la imprenta, que haría posible el llamado Renacimiento. Durante la Edad Media (aproximadamente del siglo V al XV), aunque suele considerársele una época de estancamiento científico en Europa, en realidad hubo importantes avances, tanto en el mundo islámico como en ciertas regiones europeas. Se consolidó la medicina como ciencia, se fundaron hospitales, se desarrolló la cirugía como disciplina médica, se avanzó en matemáticas, astronomía y óptica; se tradujeron obras clásicas (de Aristóteles, Galeno, Euclides) al árabe, y del árabe al latín en centros como Toledo y Córdoba. Fue la época de grandes pensadores como Roger Bacon y Guillermo de Ockham, quienes comenzaron a desarrollar una metodología de investigación más empírica. Todo esto viene a cuento por una obra preparada por el Fondo de Cultura Económica y coordinada por Umberto Eco: La Edad Media (FCE, México, 2024, 3.ª ed.), compuesta por cuatro tomos, cada uno dedicado a distintos aspectos de esta época: Cada tomo, que puede leerse por separado, es una antología de estudios sobre diversos temas. El tomo I, por ejemplo, contiene estudios sobre historia, ciencia y tecnología, filosofía, literatura, arte, etc., todo expuesto de forma accesible y bien documentada. No son mamotretos para especialistas, sino obras pensadas para fomentar una cultura general sólida y afinar nuestra visión sobre una época fundamental de la historia humana, desmontando muchos de los mitos y estereotipos que solemos tener sobre la Edad Media. Me parece una obra muy interesante, entretenida y fundamental. Creo que, después de leerla, podremos lanzar una gran sonrisa ante muchas de las ideas preconcebidas que circulan por ahí. A fin de cuentas, hasta para insultar se nos dice: «tienes una visión medieval», como si eso fuera necesariamente negativo. O como los renacentistas italianos, que llamaron «gótica» a una arquitectura que consideraban bárbara y salvaje... ¡Ellos, que llamaban «bárbaros» a todos los diferentes!
Por ejemplo, usamos el término «gótico» como sinónimo de oscuridad y terror: literatura gótica, terror gótico e incluso una tribu urbana llamada los góticos que se visten de negro. Sin embargo, el arte gótico es un estilo artístico y arquitectónico que se desarrolló en Europa entre los siglos XII y XVI, principalmente en la construcción de iglesias y catedrales. Aunque mucha gente lo asocia con «lo oscuro», esa idea es más un malentendido moderno que una descripción fiel de lo que realmente fue el arte gótico.
Profesor Investigador del Centro Multidisciplinario de Estudios en Biotecnología y
Jefe del Departamento de Comunicación de la Ciencia de la
Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.La Edad Media no es un periodo tan reconocible como otros, como el Renacimiento, el Barroco o el Romanticismo. Corresponde a un lapso que va desde la caída del Imperio romano de Occidente (476 d. C.) hasta el «descubrimiento» de América por los europeos (1492 d. C.). Comprende, aproximadamente, mil años de historia (siglos V al XV).
La edad media
Año 14 / Número 80 / 2025