En una madrugada del verano pasado, al salir de mi casa, al sur de Morelia, me percaté de un extraño movimiento entre los arbustos al otro lado de la calle. Me quedé viendo fijamente durante unos segundos cuando de pronto, de entre las ramas, salió un animalito que parecía ser una rata gigante con dientes grandes y puntiagudos, despeinada y sin pelos en su cola. Me asombró ver un animal tan raro. Por un momento pensé que me iba a atacar; sin embargo, mi presencia no causó ninguna impresión en él y siguió su camino tranquilamente, adentrándose a la maleza una vez más. Caminé hacia la escuela sin dejar de pensar en aquel animalito y, una vez en el salón de clases, le conté a mis compañeros sobre mi extraño vecino peludo y uno de ellos con una firme convicción me dijo: Ese era un tlacuache norteño.
¿Qué es un tlacuache?
El tlacuache norteño o zarigüeya (Didelphis virginiana), es un mamífero del grupo de los marsupiales, esto es, que tienen bolsa en el vientre. Se distribuye desde el sureste de Canadá hasta el noreste de Costa Rica. En México se encuentra en casi todo el territorio, habitan en tierras bajas cerca de ríos, tierras de cultivo y zonas suburbanas, encontrándose a menos de los tres mil metros de altura sobre nivel del mar. Están emparentados con los canguros, koalas y el demonio de Tasmania; no obstante, son los únicos del grupo de los marsupiales que se encuentran en América. Su nombre proviene del náhuatl ‘tlacuatni’ que significa «al comelón». Este simpático animal tiene un tamaño menor a 1 m, con un peso por debajo de los 2.8 kg; son nocturnos, arborícolas y terrestres, no son territoriales, pero pueden defenderse si se sienten amenazados, ya que tienen una dentadura compleja con dientes filosos.
La coloración de estos animales es gris o blanco en la espalda, presentan pelo largo y grueso con puntas blancas, su abdomen es completamente blanco. Su cabeza tiene coloración blanca en el rostro, con anillos oculares negros y una línea pálida en la frente. Su cola no presenta pelo y tiene un tamaño igual al del cuerpo, es prensil.
Estos animales tienen una alimentación omnívora, por lo que son controladores de plagas, de allí su importancia en los ecosistemas, pues ayudan a mantener las poblaciones de insectos, pequeños vertebrados y carroña. En una noche pueden cubrir hasta un área de 2.4 km2 en busca de alimento.
¿Sabes cómo se reproducen?
Los tlacuaches alcanzan su madurez sexual entre los seis u ocho meses, las hembras tienen dos años de actividad reproductiva ya que pocas llegan al tercer año de vida, su periodo de gestación es de 12 o 13 días, teniendo una camada de seis a nueve crías. Al nacer, las crías tienen un tamaño de 1 a 1.5 cm y pesan de 130 a 160 g, después del nacimiento migran hacia el marsupio (bolsa externa en la zona del vientre), donde continúan desarrollándose hasta los 50 días, finalmente, se independizan de la madre a los tres o cinco meses.
Especies similares en México
Al investigar más acerca del tlacuache, supe que en México habitan siete especies adicionales a la Didelphis virginiana, las cuales se describen a continuación:
Tlacuache de agua (Chironectes minimus) tiene un tamaño de 64 a 74 cm; su cara es color café con una franja blanca; sus patas traseras tienen membranas para facilitar la natación, mientras que en las delanteras sus dedos carecen de uñas.
Tlacuache común (Didelphis marsupialis) posee un tamaño de 32 a 42 cm; el dorso es de color gris a negro; el pelaje es amarillo pálido; la cabeza es oscura excepto en el hocico donde es más pálido; es muy similar a la Didelphis virginiana, tanto que es difícil diferenciarlos a simple vista.
Tlacuache ratón mexicano (Marmosa mexicana) es el más pequeño de los tlacuaches de México. Presenta un tamaño de 26 a 38.6 cm; los lados de la cara, el interior de las extremidades y el vientre, son de color amarillo blanquecino a marrón claro; tiene un anillo negro que rodea los ojos; el dorso es de color canela o rojo pardusco con tonalidades.
Tlacuache lanudo (Caluromys derbianus) es un marsupial con un tamaño de 58 a 76 cm; la cara es de color gris; las orejas son redondeadas de color rosa; el pelo es largo, denso y fino.
Tlacuachín (Tlacuatzin canescens) es un mamífero del tamaño de un ratón con los ojos grandes y oscuros; las ojeras muy visibles ya que carecen de pelo; la cola es más larga que el cuerpo.
Tlacuache café cuatro ojos (Metachirus nudicaudatus) tiene un tamaño de 56 a 60 cm; es de color café parduzco; el pelo es relativamente corto y lanoso; no tiene marsupio.
Tlacuache gris cuatro ojos (Philander opossum) posee un tamaño de 48 a 61 cm; la cara tiene una región oscura a manera de máscara; tiene un par de manchas blancas sobre cada ojo; su cuerpo es de gris pálido a negro.
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Mitos relacionados con el tlacuache
Uno de los mitos más comunes es que son ratas gigantes, lo cual no es verdad, ya que son marsupiales, mientras que las ratas son del grupo de los placentarios. Otro de los mitos es que son agresivos cuando en realidad su comportamiento es dócil y fácil de domesticar, ya que son lentos y con mala visión. En algunas partes de México, consideran que la carne tiene propiedades medicinales, principalmente para alergias y el asma, o que es afrodisíaca. Ninguna de estas cualidades se ha comprobado.
Otro mito es que trasmiten enfermedades como la rabia, enfermedad propagada por los virus del género Lyssavirus hacia los animales y el hombre. En el humano, es trasmitida principalmente por la saliva de animales infectados; sin embargo, los tlacuaches no son portadores debido a que su temperatura corporal es de 34 a 37 °C, lo cual no permite que el virus se incube en su cuerpo.
Datos curiosos
Investigadores del departamento de Psicología de la Universidad de Florida en los Estados Unidos de América, determinaron que la frecuencia de audición de los tlacuaches es de uno a 64 KHz, mientras que el del humano es de 20 a 20 000 KHz, esto significa que están en el rango de infrasonidos registrado en los topos y elefantes.
La familia Didelphidae presenta cinco dedos en manos y pies, y muchas especies presentan hallux pollex o pulgar flexible en la patas delanteras. En Didelphis virginiana, el dedo pulgar es flexible en las patas traseras, pero no en las delanteras.
Depredadores principales y mecanismos de defensa
Su depredador principal es el hombre, además de aves rapaces, coyotes (Canis latrans) y serpientes como boas. Sin embargo, tienen varios mecanismos de defensa y pueden sobrevivir al veneno de la serpiente cascabel. También, pueden simular que están muertos al entrar en estado de coma cuando sienten peligro, a esta habilidad se le llama tanatosis.
Estado de conservación
Para la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), esta especie se encuentra clasificada como de menor preocupación. En México, en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, no se encuentra en ninguna categoría de riesgo. Aunque en México se conoce sobre la distribución de la especie y su biología, hay muy pocos estudios moleculares en el Centro Nacional para la Información Biotecnológica (NCBI, por sus siglas en inglés), solo se encuentran almacenados 394 secuencias de ADN.
Se conoce poco de los tlacuaches, por lo que resulta interesante su estudio, pues representa una especie endémica del continente americano, a la vez que el estudio de su genoma podría aportar pistas sobre su origen y de cómo evolucionó hasta lo que es hoy. ¡Esto daría conciencia para protegerlo!
Para Saber Más:
Aranda-Sánchez J.M. (2012). Manual para el rastreo de mamíferos silvestres de México. CONABIO, México, 39-52.
https://www.biodiversidad.gob.mx/publicaciones/versiones_digitales/ManualRastreoMamiferosMexico.pdf
Pérez-Hernández R., Lew D. y Solari S. (2016). Didelphis virginiana. The IUCN Red List of Threatened Species 2016: e. T40502A22176259.
https://dx.doi.org/10.2305/IUCN.UK.2016-1.RLTS.T40502A22176259.en
NCBI. (2021). https://www.ncbi.nlm.nih.gov/Taxonomy/Browser/wwwtax.cgi?id=9267
Núñez G.A. (2005). Los Mamíferos silvestres de Michoacán diversidad, biología e importancia, Primera edición, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Coordinación de la Investigación Científica, Facultad de Biología, Laboratorio de Mastozoología, 21-26.
Julio Christopher Sendejas-Cancino. Estudiante del Programa Institucional de Maestría en Ciencias Biológicas, Instituto de Investigaciones Agropecuarias y Forestales, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
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José Herrera-Camacho. Profesor e Investigador del Instituto de Investigaciones Agropecuarias y Forestales, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
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http://bios.biologia.umich.mx/files/los_mamiferos_silvestres_de_michoacan_arturo_nunez_garduno.pdf