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En la actualidad, las prótesis son difíciles de conseguir debido al sistema sanitario de cada país y sus normativas; asimismo, cuando realmente son efectivas, el costo que tienen es excesivo. Pero, ¿y si te la puedes confeccionar tú mismo? o ¿un familiar o amigos? Hacerlas a partir de materiales reciclados de uso diario y con un bajo costo, es la propuesta que te lanzamos, ¿te atreves?
Necesidad de prótesis
La pérdida de uno o varios miembros conlleva a limitaciones funcionales impidiendo, en muchas ocasiones, llevar una vida autónoma y participar en el desempeño cotidiano. En estos casos, el uso de prótesis puede reducir la necesidad de cuidados, apoyos y/o tratamientos. Si no se puede acceder a dicha prestación (uso de una prótesis adaptada), las personas que las necesitan quedan excluidas y aisladas, incrementándose la morbilidad y la discapacidad.
Es evidente la necesidad de crear servicios ortoprotésicos, pero ello depende de las políticas y de los planes nacionales específicos, los cuales se deben elaborar a partir de la comprensión de lo que implica la limitación que supone la ausencia de funcionalidad, así como dotar de los fondos necesarios para atender a los grupos con riesgo, en conflictos bélicos, con rentas bajas, etc., puesto que actualmente encontramos multitud de personas sin recursos para adquirir una prótesis, las cuales, como mencionamos, tienen un costo muy elevado.
En este artículo se procura una alternativa que cualquier persona puede realizar de manera fácil, asequible, ecológica y con un precio ínfimo, para que de manera temporal, e incluso de manera continuada, quien lo necesite pueda proveerse de los artefactos necesarios para cubrir su necesidad funcional. Además, ante el presente descuido ecológico, se articula la reutilización y/o reciclado de materiales, colaborando así con la conservación del tan magullado medio ambiente.
Precios de prótesis (en Euros).
Mejorando la calidad de vida
Terapia Ocupacional es el nombre de la disciplina desde la cual se realizó el proyecto. Esta encarna el concepto de bienestar biopsicosocial que define la salud, enraizando en su habilidad diaria el fomento de la salud y de la intervención en individuos, en poblaciones, en organizaciones y en instituciones, mediante el compromiso con la ocupación. La labor profesional analiza exhaustivamente herramientas, implementándolas en función de objetivos concretos. Dicho de otro modo, mejorar la calidad de vida de las personas con lo que tenemos «a mano» (a falta de los elementos necesarios).
Pensando en la maravillosa y eficiente «máquina» que resulta ser el cuerpo humano, más aún cuando se la relación con el entorno, se debe resaltar la tremenda funcionalidad que proporcionan las manos, pues otorgan acciones esenciales para la supervivencia física en el movimiento, la sociabilidad, la relación, el arte y el aprendizaje. En este sentido, su pérdida conlleva a una experiencia traumática que requerirá de un largo y arduo tratamiento que implica la intervención de especialistas de todas las posibles áreas afectadas: medicina, enfermería, terapia ocupacional, fisioterapia, psicología, trabajo social, técnicos ortopedas. A lo largo de todo este proceso, habrá que encontrar la prótesis más idónea, efectiva y funcional para cada caso. Dicho todo esto, ya parece un recorrido caro y difícil.
Por otra parte, con toda seguridad, muchas personas pensarán que una amputación no es algo que ocurre de manera diaria. Pues bien —y pese que es un área donde los datos nunca son exactos y difieren unos de otros—, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que el 0.5 % de la población mundial necesita prótesis, ortesis y rehabilitación, lo que supone entre 35 y 40 millones de personas.
Dado el incremento de la esperanza de vida, se establece que en las próximas décadas la población con necesidades ortoprotésicas crecerá significativamente, resultando como estimación de población afectada el 1 % mundial, es decir, entre 70 y 80 millones de personas. De estas cifras, de acuerdo a la Encuesta Mundial de Salud de 2004, alrededor de 30 millones de personas residen en países con recursos limitados.
Tipos y precios de prótesis
Es cierto que en nuestros días se pueden encontrar en el mercado multitud de tipos de prótesis, desde las fabricadas con técnicas de impresión 3D, las mecánicas que son las de menor costo, hasta las mioeléctricas y robóticas que llegan a costar más de un millón de pesos (30 000-60 000 €). De hecho, las de impresión 3D nacieron para ayudar a personas sin recursos. Hoy se pueden encontrar iniciativas como Ayúdame 3D (https://ayudame3d.org/), la cual nació mediante un proceso de crowdfunding, con el objetivo de distribuir prótesis de manera gratuita a personas necesitadas, o E-Nable (http://enablingthefuture.org/) de Estados Unidos de América, una organización no gubernamental internacional que ha facilitado más de mil quinientas manos artificiales. El problema es su dificultad de movimientos y acceder en tiempo.
Ante la situación percibida y contrastada, se pensó en dar respuesta y solución a la necesidad de las personas que requieren de una prótesis. Es así como se elaboraron de manera artesanal prototipos protésicos temporales a bajo coste y funcionales de miembro superior, con la finalidad de que las personas puedan continuar realizando las actividades de la vida diaria, tales como comer, peinarse, afeitarse, lavarse los dientes, usar el teléfono móvil y escribir.
Una de las premisas del proyecto es que se puedan confeccionar de manera fácil y rápida, a la vez que se utilicen materiales reciclados para su elaboración.
Así pues, partiendo desde la Terapia Ocupacional (integrando personal de Psicología), y teniendo en cuenta previamente que el muñón debe estar sano y estable o en condiciones, con su forma, sin edema y heridas quirúrgicas cerradas, y una vez estudiada la medida del diámetro del muñón, así como las necesidades personales (hábitos), se procedió a sistematizar cada uno de los pasos para su elaboración, los cuales son accesible a cualquier persona.
¡Haz tu propia prótesis!
1.Realización
Para realizar la primera propuesta de prototipo protésico, se necesitarán los siguientes elementos: botellas de plástico reciclado, cúter, tijera, alicate, aguja, metro, transportador de ángulos y guantes, todo ello para llevar a cabo los cortes, aportar ángulos funcionales y tener la seguridad adecuada. Luego se seleccionan los útiles que se quieren colocar en la prótesis para realizar las actividades diarias, tales como cubiertos (tenedor, cuchillo, cuchara sopera y cucharilla), herramientas de aseo personal (peine o cepillo, maquinilla de afeitar, cepillo de dientes, etc.), así como otros elementos para realizar otras funciones (móvil, bolígrafo o lapicero, etc.).
Por otra parte, y para obtener una función más estética, se realiza la segunda propuesta: un prototipo de mano funcional, pudiendo aparentar que no existe ausencia de la original. Para su elaboración se necesitarán los siguientes elementos reciclados y no reciclados (variables): botella de plástico, alambre, esparadrapo, papel de burbujas o corcho o poliespán, etc., y de manera opcional guantes.
- Procedimiento
Paso 1. Se coge una botella (según diámetro muñón-modelo) y, tras colocarse el guante de seguridad en la mano que fija la botella, se cortará por la zona final o fondo.
Paso 2. Se corta en la parte inferior de la botella un semicírculo de manera que, si fuera el caso, no molestara al flexionar el codo (según medidas de la persona y de la botella).
Paso 3. Se procede a seccionar en la parte superior, en la zona del tapón, con tamaño acorde al utensilio a fijar (entre 1-2 cm) con el cúter.
Paso 4. Con el transportador de ángulos se medirá de forma que haya una inclinación aproximadamente de 35º. Se realiza para poder, una vez realizado y en uso, acceder mejor a la boca, el pelo, etc.
Paso 5. Establecido el ángulo, localizamos el punto en la botella y realizamos con el cúter otra sección similar a la anterior en el lado contrario. Así queda fijado mecánicamente por dos puntos y la introducción de cualquier útil no entorpecerá ni molestará al muñón.
Una vez elaborado, vamos colocando los útiles para la actividad que se desea realizar (alimentación, aseo, ocio, etc.), tal y como se aprecia en las siguientes imágenes.
Prótesis de mano
Como les comentamos, vamos a realizar también algo parecido a una mano estética para evitar las miradas de los extraños. ¡Pues vamos a ello!
Paso 1. Tomaremos alambre con un tamaño aproximado al de la mano de la persona, tamaño del que se eliminará el 20 % del volumen, dado que se envolverá por completo.
Paso 2. Con un alicate realizaremos la forma de una mano, pudiendo apoyarse como modelo en la propia (izquierda/derecha), aplicando dos vueltas para que tenga más firmeza, hasta tener conformada toda la mano.
Paso 3. Posteriormente, se cierran los bordes del alambre que previamente se han dejado más largos para un mejor manejo.
Paso 4. Ahora se selecciona el material a situar en el centro de la mano, dado que ha quedado un hueco. Este puede ser corcho, poliespán o plásticos reciclados para aportarles mayor vida útil hasta que se degraden.
Paso 5. Se rellena el hueco existente entre la mano de alambre, se fija y cubre con esparadrapo.
Paso 6. Se puede usar papel de embalaje (papel de burbujas) u otro reciclado. Se recortan 16 tiras de entre 1 y 2 cm y se colocan rodeando los dedos, a modo de falanges. Posteriormente, se cubre con esparadrapo, lo que le da una flexibilidad y almohadillado relativamente blando, semejante al de la mano humana. Continuaremos hasta que quede completamente revestida de esparadrapo.
Paso 7. A continuación, procedemos a darle estabilidad y fortaleza con otro revestimiento de esparadrapo, pero aquí será de tela con un color marrón o carnoso, lo que le dará un aspecto aproximado a una mano y con posibilidad de colocarla en distintas posiciones.
Paso 8. Se une a la botella original, realizando un agujero en la parte superior o tapón, y fijándola con otro orificio al lateral de la botella original.
Una vez realizados todos los prototipos protésicos, se podrá dotarlos de un color semejante a la piel de la persona, realizar tatuajes o dibujos, como más le guste al destinatario. Resultando (ejemplos):
Todo el proceso de realización no lleva más de 10 minutos. Lo que más costará en tiempo, es el pintado de color o tatuajes, pero básicamente por los tiempos de secado. En cuanto a la adaptación de la persona al prototipo protésico, no hay ningún problema.
En conclusión, podemos decir que es posible realizar artesanalmente prototipos protésicos temporales reciclados funcionales, siendo muy válido para la población en general (universal) y en casos de dificultad de recursos y funcionalidad mermada. Asimismo, resultan útiles para aquellas personas que se encuentran en espera de sus prótesis definitivas para que no dejen de realizar sus actividades.
ADAMPI. (2006). Sobre amputaciones: Las estadísticas de las amputaciones en España. http://www.adampivalencia.com/sobre-amputationes/
Organización Mundial de la Salud, OMS. (2017). Normas para prótesis y órtesis. Parte 1. Estándares. Organización Mundial de la Salud: https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/259209/9789241512480-part2-eng.pdf?sequence=2&isAllowed=y
Valero-González J.M. (2020). Sistematización de prótesis recicladas [Trabajo Fin de Máster, Universidad de Zaragoza]. https://zaguan.unizar.es/record/98558/files/TAZ-TFM-2020-874.pdf
Julián Manuel Valero-González. Doctorando en Ciencias de la Salud y del Deporte, Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad de Zaragoza. Postgrado en Dirección de Centros y Urgencias en Psiquiatría.
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Vanessa Sanz-López. Doctorando en Ciencias de la Salud y del Deporte, Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad de Zaragoza. Postgrado en Dirección de Centros.
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